U. T. A. A.

Cartel de expectación y puede decirse que lleno completo a diferencia de otras tardes. Los toros de Jandilla, al modo del medio toro moderno de hoy, hicieron su papel. La suerte de varas en la mayoría de ellos fue puro teatro. El toro acude al caballo, casi siempre mal colocado y el picador se limita a sostenerlo si el astado empuja algo. Si no es así simula la suerte y raudo acude un subalterno para sacar el toro del caballo. Por supuesto, los quites no existen y en la tarde de ayer solamente CASTELLA por chiculelinas.
La presentación fue desigual. Los toros lidiados en cuarto y quinto lugar eran gatunos. El resto, incluido el sobrero, estaban rematados en su tipo, aunque desiguales en su conformación zootécnica. El tercero en los lances de recibo se congestionó y hubo de ser devuelto.
En esta tarde se confirmó MANZANARES como triunfador de la feria. El fino torero de tierras de Alicante posee el don del temple y consiguió en sus dos toros entusiasmar los tendidos. Ha corregido esta tarde su vieja costumbre de no ligar las series y de desplazar el toro para fuera. En esta ocasión componía bien la reunión y sus dos toros encelados en la muleta eran dominados por la capacidad y el mando de MANZANARES.
Esta temporada debería ser la de la competencia JULI-MANZANARES y que este atractivo para los aficionados se complete con el anuncio de estos dos matadores en carteles con ganado encastado alejado del medio toro de hoy.
CASTELLA se deja marchar con las orejas puestas su primer toro que respondía bien por los dos pitones y este torero compone una faena acortando distancias desde el principio, cuando lo que el toro requería era citarle de lejos para embarcarlo con la muleta adelantada. Saca a relucir los defectos de hoy colocándose fuera de la jurisdicción del toro, abusando del pico y desplazando el morlaco y no dejarlo colocado para ligar muletazos.
En su segundo que fue un toro soso y rajado, al menos debe poner el empeño y las ganas que LUQUE aportó en la tarde de ayer, pero el francés parece que esta actitud de entrega no va con él.
A TALAVANTE le ha venido ancha la feria viniendo a Sevilla dos tardes. Si ni con el medio toro no es capaz de superar las dificultades que le presentan, es mejor que continúe su carrera en esas plazas donde la exigencia brilla por su ausencia y gustan del toreo desviado y apático que mostró esta tarde.
La feria enfila su recta final y va siendo hora de los balances. La cosa va a resultar sencilla por lo poco a destacar y lo mucho a censurar. Dos toreros, JULI y MANZANARES con el medio toro hicieron lo mejor. En un ciclo tan largo, escaso bagaje en una Fiesta que necesita muchas vitaminas para revitalizarla.