U. T. A. A.

Sábado de farolillos y corrida que programa la empresa para hacer caja, que no para hacer afición. Acude a los tendidos público ocasional con entrada regalada o visitante foráneo que poco o nada entiende lo que sucede en el ruedo.
Los toros de Manolo González que han faltado varios años de Sevilla, es preferible que sigan faltando porque ni en presentación ni en juego mostraron atributos merecedores para tal honor. Presentados en escalera irregular, donde el primero era impropio por trapio para plaza de primera y el resto de hechuras diferentes con poca casta y escasas posibilidades de embestir. Encima dos de ellos, tercero y cuarto, presentaban pitones sospechosos de una manipulación no natural.
No se comprende que si la autoridad visita las ganaderías para elegir toros con trapío y hechuras de plaza de primera y corridas igualadas, salgan por chiqueros los toros de la tarde de hoy.
Insistimos de nuevo en la manipulación más que grosera se hace cada tarde de la suerte de varas con total consentimiento de la autoridad que no hace por corregirlo. Esta tarde se volvieron a colocar toros prácticamente debajo del peto. Lidiadores junto al caballo distrayendo la atención del toro. Puyazos simulados etc. Una tarde y otra de esta manera. Al menos esperamos que las propuestas de sanción por parte de la autoridad hagan mella en los manipuladores de esta parte de la lidia.
JUAN MORA, torero veterano que se anuncia en la feria por mor de su triunfo en la feria de otoño de Madrid, se muestra sobrado en sus dos toros para saber que con las dificultades que presentan de media embestida, cara alta y escasa casta no es posible el lucimiento. Quizás este tipo de toro necesite una lidia hoy olvidada, pero los tiempos no están para estas cuestiones.
CURRO DÍAZ ofrece en los primeros compases de faena de su primero lo único reseñable de la tarde con muletazos marca de la casa. El toro se apaga pronto y la faena a menos. En el quinto, toro difícil y tobillero de Salvador Domecq, es avisado en varias ocasiones del peligro que mostraba el astado y en un muletazo le engancha la pantorrilla de la pierna derecha y le infiere una cornada con entrada y salida que rompe el peroné. Conducido a la enfermería el toro lo pasaporta JUAN MORA.
EL FANDI acude los sábados de feria a Sevilla al encuentro del público que gusta de sus evoluciones poniendo banderillas a toro pasado, pero que aplaude con ganas lo espectacular de esas carreras que agotan al toro. Con la muleta, que usa de forma ventajista y sin temple no dice nada este diestro.